Mantenimiento de Lino
EN TRES PASOS


1. LAVAR EL Lino
Para cuidar su Lino, recomendamos lavarlo a mano. Sin embargo, es posible lavarla a máquina, siempre que elijas un programa delicado a 30 °C para preservar la flexibilidad de las fibras. En cambio, desaconsejamos la limpieza en seco. Recuerda también lavar las prendas del revés y separar los colores claros para evitar la transferencia de color. Muchos artículos, como nuestros Lino para hombre, se tiñen en prenda, lo que les confiere un color sutil y un tacto más suave. El lavado no altera la calidad del tejido, pero el proceso está diseñado para desarrollar el tono con el tiempo, dando un efecto de pátina natural que hace que cada pieza sea única.
- Lavado a mano o ciclo delicado a 30°C
- Lavar preferentemente del revés.
- Separar los colores de los tonos claros
2. Secar el Lino
El secado es un paso esencial en el cuidado de la ropa por Lino. Recomendamos el secado al aire, lejos de la luz solar directa, para preservar la fibra y el color del tejido. Naturalmente aireado y fluido, el Lino tiene tendencia a arrugarse, un aspecto apreciado por su auténtico encanto. Sin embargo, el lavado a máquina puede acentuar en exceso este efecto, provocando incluso su encogimiento. Para limitar las arrugas, lo mejor es colgar las prendas en una percha en cuanto salgan de la lavadora. Si después del secado siguen demasiado arrugadas, puede ser necesario plancharlas. Para preservar el tejido, se recomienda planchar por el revés, sobre el tejido ligeramente húmedo, con una plancha caliente que no supere los 150 °C.
- Secar al aire en una percha
- Planchar el tejido húmedo del revés a 150°C




3. LA Lino TIEMPO DE PLANCHADO
Ropa hecha de Lino es un material natural que mejora con el tiempo. Sus fibras se vuelven más suaves lavado tras lavado, lo que le confiere un tacto cada vez más suave y un ajuste más fluido sin perder ni un ápice de su calidad. Sin embargo, el cuidado de Lino Sin embargo, para cuidar tus prendas debes tomar algunas precauciones: cuando no las lleves puestas, te recomendamos que guardes la Lino en un lugar seco, alejado de la humedad y la luz directa, para evitar que su color pierda intensidad. Para las piezas más estructuradas, dóblelas con cuidado o utilice una percha para minimizar las arrugas marcadas. A diferencia de otros tejidos Lino no necesita funda de plástico, que podría retener la humedad y alterar la fibra.
- Guardar en un lugar seco y protegido de la luz
- Guardar en una percha